Villa de Cura: Mi Macondo, Mi Utopía, Mi Realidad

Por: Emilio Pino Salinas
Villa de Cura, estado Aragua
correo: emiliopinosalinas@gmail.com

     Siempre le he tenido miedo a esta frase “No eres Profeta en tú Tierra”, puede ser que ocurra o que nunca suceda, solo el tiempo lo sabrá, y los miedos se superan. Lo que si queda claro es que mi tierra es: Villa de Cura, mi Macondo, mi utopía, mi realidad, donde están las memorias, los relatos. Ese pueblo de historias complejas, conspira la dialéctica, aparece Dios (los Ateos dicen que no aparece) y va pasando como una película las imágenes imborrables: El Beisbol, la escuela Antonio Pérez Bonalde ( En el sector Guayabal de los Colorados), Loco Lindo, La Militancia Política, la cultura, los barberos, nuevamente Loco Lindo y su panadería ( donde comíamos esos sabrosos dulces con un refresco de toronja y acompañados de la música de Gardel), la Iglesia, las imágenes religiosas, las peregrinaciones, los pecados... Es que Villa de Cura son tantas cosas:alegrías, tristezas, la lucha del Poder Popular,  pero también vive la sombra parasitaria de los Politiqueros, allí están las Batallas Cotidianas, le decimos No al Relleno Sanitario; La Villa, es un Pueblo digno del realismo mágico, es el viento solitario o el abrazo solidario.

     ¡Qué nostalgia, qué oportunidad tan insoportable de ser bohemios!  Todo lo recodamos, todo lo vivimos, de cierta forma cada uno de nosotros ha sido un pilar fundamental para que algo de la historia permanezca intacta, aunque muchos estén muertos, aunque las viejas casa han muerto ( por la necedad de los comerciantes villacuranos y asiáticos de hacerse ricos).

    Te felicito, Villa de Cura, 292 años de Palabra de viva, de memoria. Seguramente no sea tú profeta o realmente no sé qué pase, pero siempre seré tú hijo.