Para los soñadores y soñadoras que anhelamos ver y sentir a Venezuela nuevamente como una tierra próspera y de oportunidades para nuestro presente y nuestro futuro.
Para quienes perseveran en el extranjero en la búsqueda de mejores logros, aquellos que las circunstancias de nuestro país no les permitieron realizar.
A los que se atreven, a los que luchan cada día desde sus labores en el hogar o sus puestos de trabajo.
A los que se oponen a las injusticias y se esfuerzan en la búsqueda de un mejor porvenir; a los que aman, a los que ríen, a los que lloran; a quienes caen y se levantan para continuar luego con mayor fortaleza y entusiasmo; a quienes tienden su mano amiga cada vez que el prójimo lo requiera.
A quienes ponen sus mejillas una y otra vez y encuentran en el perdón a quien les hiere su propia salvación.
A los de casa, a los de afuera, a las familias, a los amigos y amigas que siempre están… “Ningún soñador es pequeño y ningún sueño es demasiado grande” Sólo falta ponerle voluntad, empeño, amor, dedicación, fe y optimismo a lo que hacemos para alzar vuelo con nuestros propósitos y seguir adelante con mayor fuerza y así alcanzar nobles metas para hacer que nuestros más hermosos sueños se hagan siempre realidad…
Para ustedes que continuamente están acá, en mis pensamientos y muy dentro del corazón…
¡Feliz Navidad y un venturoso Año Nuevo!
Jhon Manuel Cáceres
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